La columna de hoy de IDEAL parte de una excelente velada, el sábado pasado, con un grupo de personas intelectualmente inquietas, siempre a la búsqueda de la verdad.
Esta entrada está dedicada especialmente a Andrés Sopeña, uno de mis mejores profesores de Derecho. En vez de exigirte memorizar temas y artículos, te invitaba a pensar y reflexionar. Ahí es nada.
En el nunca suficientemente valorado Museo Arqueológico de Granada se está celebrando un atractivo ciclo de conferencias que, bajo la denominación genérica de “Arqueología. Donde ciencia y aventura van de la mano”, concitó el pasado sábado a varias decenas de personas que asistieron a una vibrante charla protagonizada por José Luis Serrano y Andrés Sopeña, quiénes, con la excusa de hablar acerca de las figuras del detective y el arqueólogo, hicieron lo que mejor saben: dar rienda suelta a su proverbial enciclopedismo y espolear las neuronas de los asistentes, a través de una charla interactiva, animada y productiva.
De las muchas cosas que se dijeron en la misma, me quedo con una: las profesiones de arqueólogo y detective no son tan diferentes entre sí. A fin de cuentas, ambas disciplinas tratan de lo mismo: la búsqueda de la verdad.
La verdad. Ahí es nada. ¿Qué es la verdad? De hecho, ¿podemos asegurar que existe una verdad, única e indubitada? Sopeña y Serrano son fervientes defensores del no. No hay verdades inmutables. Todo depende del momento, de las circunstancias, de la cultura, de la percepción, de la tradición. ¿Existe la historia como ciencia? No. La historia que nos llega, por muy revestida de cientificismo que nos sea presentada, no es sino una narración interesada de unos hechos probables del pasado.
Sin embargo, personajes como Grissom o House, en sus exitosas series televisivas, abogan por el triunfo de una ciencia pura en la que el factor humano, la etiología y la psicología no tienen cabida. Una ciencia a la que, aplicando las más prusianas técnicas detectivescas holmesianas, no se le podría poner jamás ni un pero. Una ciencia que lo mismo sirve para descubrir al culpable de un crimen que para salvar una vida humana.
Personalmente, me alineo con Sopeña y Serrano, siguiendo la famosa tesis einsteniana de que todo es relativo. La objetividad no existe y la neutralidad es una falacia. Por seguir con el tema de los detectives, diríamos que los defensores de las tesis cientificistas se concentran en el famoso “quién lo hizo”. A través de mecanismos inductivos y deductivos, analizando fríamente las pruebas de cada caso, los sagaces investigadores determinan quién es el culpable, se le detiene, juzga y condena y la vida sigue.
Otra tradición negro-literaria-criminal, sin embargo, se preocupa del porqué de las cosas. Buscar al “quién” no es sino un camino para descubrir las circunstancias, los motivos y los condicionantes que rodean la comisión de un delito, escarbando en las heces, la miseria y los claroscuros de una sociedad compleja, violenta y contradictoria. Ése es el género negro que nos gusta y que reivindicamos. Una literatura en que los detectives buscan la parte de verdad que se oculta bajo la superficie de la realidad más aparente, lo que siempre resulta tan difícil como excitante.
Jesús Lens Espinosa de los Monteros.
Etiquetas: verdad, novela negra, sopeña, serrano, detective, arqueología
15 comentarios:
Mucha "verdad" contiene tu excelente artículo, Patón.
Y es que si la verdad es relativa, podríamos pensar o reflexionar sobre las mentiras... ¿ Son antiguas verdades ? ¿ son otro tipo u otra manera de enfocar la verdad?
Me quedaría con la definición poética que hizo sobre la verdad D. Antonio Machado.
Saludos. Alfa79
A ver esa definición!!!!!!!!!
Dos definiciones nos dejó A. Machado. La interpretación es libre. Como la "verdad".
"Tu verdad no; la verdad / y ven conmigo a buscarla. /La tuya, guárdatela."
"La verdad es lo que es, y sigue siendo verdad aunque se piense al revés."
Salud y estoy pendiente del CONTADOR... Alfa79
Buen artículo y soy conforme. La "historia" no debia ser asignatura, solo algo curioso e investigable. Sin ir mas lejos, nuestra Historia esta llena de pequeñas historias y de historiados, ahora, puede ser, que los historiadores sean objetivos pero antes... Los de antes con ser amigos del historiado era suficiente, ahora se necesita dinero, tiempo y paciencia, buena salud y no ser personaje o vivir de la novela historica.
Efectivamente. La historia es que es muy interesada. Mira Pío Moa cómo la prostituye sin recato alguno, querido Foces.
Alfa, bonitas frases. ¿Qué tal si construyes una entrada en tu Rosa sobre el mismo tema?
El contador cabalga imparable hacia el 50.000, aunque los viernes por la tarde, la cosa del Interneteo se para un poco. Y más cuando empieza el buen tiempo... ¿Será hoy? ;-)
El Pio tiene sus lectores, especialmente aquellos que quieren justificar sus actos o los de los suyos. Como el Pio en su lado, hay otros en el otro lado. lo dificil es encontrar alguno sin lado.
Y si se quiere saber historia real lo primero es desmitificar y es dificil, maxime si el personaje vive, lo ultimo que estoy entremirando son dos ejemplos de "mitos", Fraga, Carrillo, uno no fue franquista y el otro no fue comunista... "respeto que son viejecillos, ya hablaremos dentro de unos años"
!!!tocate la mandolina!!!
Sopeña... qué personaje. Todos queríamos matricularnos con él en 5º.
Como dice Aristóteles "la única verdad es la realidad"..
Gran entrada Jesús, y gran tipo Sopeña, tuve la suerte de conocerlo en un congreso de cine que organizaba la univeridad y me gustó mucho su forma de hablarnos, tan directa, sencilla, espontánea y divertida. Su ponencia fue de las mejores.
Saludos.
Cuidado, gente, que como diría Favelis, la verdad suele ser mentira. No os emabaléis. Buen corpus,
Rigoletto
"Mi verdad, tu verdad, nuestra verdad".
No todo es absoluto, ni casi nada relativo. Lo único verdadero es que nada existe...
Hola Jesús.
He sido el que he realizado la visita 50.000, a tu blog.
La verdad es me gusta asomarme a esta ventana tan variada y entretenida.
Además el conocer a la persona que lo escribe hace que lo escrito me llege más.
En tu correo de empresa tienes he adjuntado documento word con el pantallazo.
Saludos de Andrés.
Andrés, ¡guay! Oye, ¿la puedes mandar a jesus-lens@telefonica.net?
Y ponme una dirección, que te mando un libro... o te lo doy en persona. Que estamos cerca...
Alucinante. Se mezclan géneros literarios con preceptos físicos para dar pie a un relativismo moral. Cada cual que tenga sus referencias y sus fobias, pero que respete a los demás, "Todo es relativo", pero ahora es de día por más que le moleste a un pseudointelectual progre. Escribo esto con dos manos y es un hecho real que no soy un pulpo. A los nuevos popes laicos les molesta eso. Pretenden que nos sintamos minúsculos con su catecismo de falsete. ¡Voto al chápiro!. Vaya visión más nefasta y amargada de nuestra vida.
Pero amigo Anónimo, ¿Qué tiene que ver la fé en esto que hablamos?
IMAGENES,IDEAS,PENSAMIENTOS..., A VECES NO TENEMOS TIEMPO PARA LA REFLEXION...,DEJAD LA INEXPERIENCIA Y VIVIREIS,SEGUID EL CAMINO DE LA PRUDENCIA.NO SEAIS INSENSATOS SINO SENSATOS,USAD LAS DOS CAPACIDADES MAS GRANDES QUE HAY EN NUESTRO ESPIRITU: LA DE AMAR Y LA DE RAZONAR.
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